El Divino Femenino es la Diosa, la que habita en tí y en mí, la que crea y la que también destruye, es la fuerza dadora de vida, la shakti, sino ¿cómo este mundo fue creado? o ¿cómo naciste tu?
La divina presencia Femenina se ha hecho sentir, en todas sus formas y aspectos, ahora más que nunca se la va comprendiendo y sobretodo viviendo, pues aquellos esquemas del viejo patriarcado se desmoronan desde su mismo núcleo, porque el sentir había sido más importante que el pensar.
Ella es el lado del corazón, la sensibilidad, la dulzura, el sintonizar con la vida antes que cuestionarla o argumentarla, porque resulta ser que nuestras acciones más importantes han sido por el amor que por el mero hecho de especular y en realidad la felicidad viene del amar no en el de tener la razón.
Así como dice el texto sagrado del tantra Vidya:
“Con su presencia llega la apertura del Sagrado Corazón, el retorno del Poder del Amor Puro Incondicional, la compasión, la gracia Amorosa, la Armonía, la Música de las Esferas, el Poder del Sonido, las Unidades más profundas.
Ahora es el momento de adentrarnos en nuestro centro al corazón para así desde el núcleo del Sagrado Corazón, vivir, actuar, irradiar, como un vasto Sol de Iluminación interior.
Cuando comienzas a vivir desde el Sagrado Corazón y por lo tanto dentro del Amor Divino e irradiando Amor Divino, no puedes hacer ni ser otra cosa que el Amor en acción, el Amor en el Ser, el Amor en todas sus formas y expresiones”.
Lo que nos lleva a entender que si comenzamos a vivir desde su divinidad y donde está presente el amor puro e incondicional, dejarán de existir los juicios, la dualidad, la polaridad. Ya no habrá ELLOS, solo NOSOTROS.
“El Divino Femenino trae curación en sus formas más elevadas. Ella sana las heridas más profundas de la humanidad. Ella trae su pureza, su Belleza, su inmensa y poderosa Alegría de ser, y con ella los Fuegos Sagrados de la Shekinah. Cuanto más se abre el centro del corazón, más retorna el Cristianismo Supremo y con él las percepciones y la comprensión más profundas, de que en verdad todos tenemos el poder de co-crear una forma de vida mucho más elevada, amorosa y centrada en el corazón“. (Tantra vidya)
Ella trae de vuelta el camino más elevado y sagrado, el camino del Amor Puro Incondicional. El conocimiento más profundo, que en verdad mi hermano, mi hermana, son de hecho parte y partícula de mí mismo, ya que todos son parte y partícula de la Fuente Divina, y por lo tanto todos en verdad son UNO.
El Divino Femenino está aquí para sanar, al Masculino herido, así como también el femenino herido y el Niño herido dentro de todos nosotros. Ella nos está enseñando que el Amor más profundo, primero necesita venir dentro de Uno Mismo en conexión con ELLA, porque si no podemos amarnos a nosotros mismos, hasta la más profunda herida, las sombras y la más alta plenitud y luz, ¡no podemos amar a otro en el mismo grado!
Cuanto más experimentas el Amor Divino que es Omnipresente, Omnipotente, Abrazador, Eterno, Inmortal y mucho más allá de las palabras, más te elevas a los reinos del Infinito.
Cuando uno ha expandido el centro del corazón hacia el Infinito, no puede reducirlo a lo mortal y lo finito. ¡Empiezas a vivir el potencial infinito del Amor Divino, siempre expandiéndose sobre sí mismo! No hay fin y no hay comienzo.
Las mejores noticias de este tiempo son que ahora podemos reanudar nuestra verdadera ALMA, la verdad de quiénes y qué somos, y dar un paso hacia la plenitud del Sagrado Corazón y el Poder del Amor, con todo lo que somos y como ¡estamos!
¡El Divino Femenino está ahí para llevarnos ahora de regreso a la plenitud, donde el Divino Masculino y el Divino Femenino se equilibran entre sí y trae plenitud y unidad en el sentido más elevado!
¡Que bendición! y ¡ Que regalo!
Es hora de conectarnos con su Presencia Divina, hombres y mujeres con la shakti que habita en todos…
Abrazos de luz,
Navita
Fuente: Sagrado y místico Tantra Vidya
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